Tras varias semanas en las que Air Europa ha recibido numerosas acusaciones por su presunta relación con el “Caso Koldo” en España (una trama de corrupción investigada por la Justicia por presuntas comisiones a trabajadores del Ministerio de Transportes a cambio de contratos públicos en plena pandemia), la aerolínea de Globalia vuelve a la palestra. Y en esta ocasión, por haber pactado con IAG excluir del proceso de compra los 200 millones de dólares retenidos por el gobierno de Venezuela, según desvela este miércoles el periódico español “El Confidencial”.
Air Europa excluye los $200M bloqueados por Venezuela del acuerdo con IAG
La aerolínea Air Europa pactó con IAG dejar fuera del proceso de compra los 200 millones retenidos por Maduro en 2012.
Se trata de un dinero que habría ingresado la compañía en el país latinoamericano y que representarían las ventas de la empresa en Venezuela de hace 12 años. Cantidad que representa casi la mitad de todo el desembolso previsto por IAG (unos 500 millones), por lo que sería una “prioridad” para la compañía recuperar ese dinero, según fuentes de la compañía.
Tanto es así que, según este medio, Globalia habría usado al actual investigado por realizar comisiones ilegales, Víctor Aldama, para que mediase en su día con el gobierno chavista para recuperar ese dinero. Unos trabajos de mediación que habrían costado a la compañía de la familia Hidalgo unos 5 millones de euros, con apenas resultados positivos.
De hecho, el propio Pepe Hidalgo, máximo responsable de la compañía, habría pedido hasta el expediente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, que mediase con Maduro para traer de vuelta los 200 millones de dólares.
Las maletas de Delcy Rodríguez, en el punto de mira.
En este punto es donde la historia se complica y entra en juego un episodio político clave en España: el “caso Delcy”. En 2020, varios medios de comunicación españoles filtraron que la mano derecha de Nicolás Maduro, Delcy Rodríguez, acudió al aeropuerto de Madrid-Barajas en un avión privado, violando (presuntamente) una orden que prohibía su estancia en territorio europeo.
Una visita que contó con la presencia del por entonces ministro de Transportes, José Luis Ábalos, su escolta y actual investigado en la trama corrupta, Koldo García, así como Aldama (el comisionista). Sin embargo, el gobierno de Pedro Sánchez defendió al titular de Transportes, a pesar de que muchos exigían saber qué hacía una autoridad española en un avión privado junto a la persona de máxima confianza de Maduro.
Fuentes de este medio aseguran que en ese avión iban los 200 millones de dólares en efectivo, pero no hay confirmación oficial que lo respalde. Y la hipótesis pierde fuerza sabiendo, ahora, que IAG aprobó que en el acuerdo de comprar se desechase la posibilidad de recuperar ese dinero. Será la Justicia quien, ahora, se encargue de investigar toda la trama, aunque fuentes de este medio descartan que ésta afecte al proceso de compra por parte de IAG.
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