Podemos, partido que en la pasada legislatura gobierno en coalición con Pedro Sánchez, presentará esta semana en el Pleno del Congreso una propuesta para establecer una moratoria en la concesión de nuevas licencias de pisos turísticos (viviendas turísticas) hasta el 1º de enero de 2028.
Piso turístico en Barcelona.
La formación argumenta que estas viviendas restringen de manera significativa la oferta de viviendas disponibles para residentes.
Una propuesta que forma parte de una moción derivada de una interpelación urgente que Podemos dirigió la semana pasada al ministro de Industria y Turismo, Jordi Hereu, en relación con el aumento de la turistificación, y que viene a potenciar la restricción de oferta de alojamientos en España, según la patronal de pisos turísticos de Madrid (Aloja Madrid).
Preocupación en Podemos
La formación liderada por Ione Belarra expresó su preocupación por este fenómeno y propone una serie de medidas para revertir la situación y promover un turismo más sostenible.
Entre las propuestas se incluye una reforma legislativa para limitar la compra de viviendas por parte de no residentes y la implementación de normas de protección medioambiental que restrinjan el acceso y la explotación de ciertas zonas naturales.
Pero, ¿es posible esta decisión política? A efectos legales y prácticos, sí. De hecho, hoteleros como Gabriel Escarrer, CEO de Meliá, lleva meses pidiendo este tipo de moratorias para "defender el turismo de calidad".
Por otro lado, ayuntamientos como Madrid, Valencia o Sevilla ya han aplicado moratorias en las concesiones de licencia de pisos turísticos, por lo que será solo cuestión de tiempo de que se apruebe una norma que lo regule a nivel nacional, según reclama AEHM, la Asociación Empresarial Hotelera de Madrid.
La medida de Podemos no solo afecta a los pisos turísticos: el ahorro de agua es "prioritario"
En la moción, Podemos también aborda la problemática del acceso al agua en un contexto en el que el 38% del territorio español está en situación de alerta por sequía.
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La formación destaca que mientras las familias y el sector primario enfrentan restricciones en el acceso al agua, un turista consume diariamente más del doble de agua que un residente en Tenerife, con un consumo de 289 litros frente a 142 litros respectivamente.
Podemos, integrado en el Grupo Mixto, defiende estas medidas como necesarias para garantizar un uso más equitativo y sostenible de los recursos y para mitigar los efectos negativos del turismo de masas en las comunidades locales.
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