Vandalismo en monumentos: ¿culpa de la masificación?

Por Borja Cameselle

El sector de los turoperadores no para de advertirlo: la demanda de viajes a Europa es absolutamente insostenible. Fuentes de las principales compañías de este subsector explican a Ladevi que, aunque están diversificando la oferta, los turistas siguen queriendo ir a los sitios típicos: Roma, París, Berlín, etc. Y esto provoca que cientos de miles de personas lleguen a capitales europeas, y entre ellas siempre hay viajeros amigos del vandalismo.

Buena prueba de ello es el último caso ocurrido en el Panteón de Roma, objeto de vandalismo con la aparición de una pintada en uno de sus muros. Concretamente un nombre metido en un corazón. El acto vandálico generó esta semana una indignación brutal en la ciudad después de que el responsable de esta acción fuese detenido.

El turista aseguró que no sabía que el monumento tenía tantos años de antigüedad y pidió disculpas para intentar esquivar la multa a la que se enfrenta: 15.000 euros. Pero expertos están evaluando cómo eliminar la pintada sin dañar el edificio, considerado una de las obras maestras más impresionantes de la arquitectura antigua.

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Varios expertos tratan de borrar la pintura del acto vandálico del Panteón romano.

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Este se suma a otros actos vandálicos, como la pintada de hace solo unos días en el mismo Panteón: "Aliens exist" (los alienígenas existen), era el texto que se podía leer en la pintada en uno de los muros laterales del histórico monumento, Patrimonio de la Humanidad.

La masificación, en el punto de mira

La pregunta está en si la masificación está detrás de este tipo de actos contra el patrimonio. La respuesta para muchas fuentes del sector es que sí: cuantas más personas lleguen al destino, más posibilidades hay de que lleguen vándalos. Así lo expone el experto periodista Juanma Romero, quien denuncia que este tipo de casos vienen multiplicándose en los últimos años.

Sin embargo, otros expertos del sector descartan que la llegada de muchos turistas a Italia (en pleno verano, como suele ser habitual), sea el motivo de este aumento repentino de actos vandálicos. De hecho, la otra visión del conflicto es que se trata de algo que siempre estuvo ahí. Siempre existieron actos vandálicos, pero ahora se amplificó este caso de la pintada por la elevada sanción de las autoridades italianas.

En España, por ejemplo, el pasado mes de mayo se registró una pintada con spray en la Catedral de Santiago de Compostela. Algo que fue anecdótico, que recogió muchos titulares en la prensa nacional pero que fue borrado al poco tiempo por las autoridades locales.

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Pintada vandálica en el exterior de la Catedral de Santiago de Compostela

RRSS

Eso sí, este delito de pintar o atacar al patrimonio histórico nacional se encuentra tipificado en el Código Penal. Según el artículo 321 del Código Penal, aquellos que derriben o alteren gravemente edificios singularmente protegidos por su interés histórico, artístico, cultural o monumental serán castigados con las penas de prisión de seis meses a tres años, multa de doce a veinticuatro meses y, en todo caso, inhabilitación especial para profesión u oficio por tiempo de uno a cinco años.

Eso sí, hay que destacar que la agencia de viajes o el turoperador que tenga a esa persona como cliente no debe responsabilizarse bajo ningún concepto de los actos que realice durante el viaje, ya que hay muchos profesionales que dudan en este aspecto de hasta dónde llega su responsabilidad.